
Con motivo del Día Mundial del Turismo entrevistamos a la influencer de viajes Marina Comes. Oriunda de Tarragona, abandonó su trabajo de abogada mercantil en una multinacional para hacer de su hobby una forma de vida. Desde entonces busca fotografiar lugares únicos, llamativos y encuadres poéticos para transmitir emociones y crear puentes entre el espectador y el destino.
¿Cómo se convierte una abogada de una multinacional en influencer de viajes?
Esto no te pasa en un día, ni en dos, ni en una semana. Es un proceso lento. En mi caso fue cuestión de un año. Es una evolución y tú no te das cuenta hasta que ya estás en una situación en la que empiezas a ser alguien atractivo para el sector del turismo, porque tienes un público relevante y por el tipo de contenido que haces. Yo trabajaba en una multinacional, viajar y la fotografía siempre han sido mis grandes pasiones. Lo hacía sin tener ningún público detrás. Viajaba muchísimo. De hecho, trabajaba para poder viajar y tengo cámaras de fotos desde los 8 años. Siempre he hecho miles de fotos que no veía nadie, simplemente porque me gustaba hacerlas, mirarlas, archivarlas, repasarlas … Y una compañera de trabajo me recomendó utilizar Instagram porque decía que mis fotos tenían algo especial. Era verano de 2015 y así lo hice, empecé a colgar mis fotos y me encantó, se convirtió en un hobby y cada día colgaba una foto. Enseguida noto que a la gente le gustan mis fotos, que mis seguidores van aumentando, el ritmo de crecimiento va subiendo a medida que van pasando los meses. En 2016 experimento un crecimiento súper radical a raíz de unas fotos que se hacen virales. Porque el fenómeno de la viralidad se repite ese año con cuatro o cinco fotos. Termino 2016 con más de 100.000 seguidores y ya empiezo a recibir mensajes y e-mails de marcas y empresas del sector del turismo para proponerme acciones. Era una etapa muy inicial del marketing con influencers. En ese momento estábamos creciendo los creadores de contenidos y las empresas intentaban entender qué pasaba. Desde entonces hasta ahora he convertido mi hobby en una forma de vida.
¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo?
Muchísimas cosas. Para mi ha sido un cambio radical. Yo vengo de trabajar en una empresa multinacional para otras personas y ahora soy autónoma con todo lo bueno y lo malo. Una cosa que tiene muy buena de ser tu propio jefe es que todas las decisiones las tomas tú: las que te equivocas y las que aciertas. Esto es una sensación que yo no había experimentado y es una libertad que es muy difícil de explicar si no la vives. Ha sido un cambio de mentalidad súper importante que me ha dado la oportunidad de vivir la vida no solo profesional, también a nivel personal la vives de otra manera. Me gusta mucho no tener que rendir cuentas a personas que no me inspiran lo más mínimo. De la parte de viajes, lo que más me gusta es sorprenderme de los destinos y los viajes. Me gusta que me demuestra que al final todos somos mucho más cercanos y más parecidos de lo que nos pensamos. Vivimos en una sociedad a la que le gusta mucho segmentar y cuando viajas te das cuentas que en lo esencial de la vida, que es lo más importante, somos todos iguales y que lo que nos preocupa, lo que nos emociona, lo que nos asusta y lo que nos hace llorar y reír es lo mismo. Y esto, me encanta. Por mucho que viajes por el mundo a sitios recónditos, no recónditos, ciudades, naturaleza, una tribu de África o un pueblo de Chile, al final, somos todos tan parecidos y estamos tan unidos que eso me da tranquilidad y esperanza.
¿Qué buscas conseguir a través de tus fotos de Instagram?
Siempre he tenido un estilo de foto muy inspirador. Yo ya hacía estas fotos antes del famoso “postureo”. Siempre me ha gustado hacer fotos más poéticas. Poesía visual. Me gusta aparecer en las fotos, porque la presencia humana en las fotos es el punto de conexión que yo creo con el espectador y el destino. Para mí es mucho más fácil que te emociones con un destino y te entren ganas de ir cuando ves a una persona en esa foto, en ese sitio, mirando al horizonte, mirando al acantilado … a lo que sea. Esa figura humana es el punto de conexión entre el espectador y la sensación de “yo quiero estar ahí”. Me gusta que la gente cuando ve la foto diga “madre mía, quiero estar ahí”, “quiero caminar por ese sitio”, “quiero perderme en esa callejuela”, “quiero bañarme en ese lago” … Quiero que la persona que ve esa foto quiera ir al lugar de la foto. Por eso intento buscar localizaciones muy llamativas, encuadres muy poéticos y que mi figura esté integrada en ese paisaje de una manera armoniosa.
¿Cuál ha sido tu viaje más “instagrameable”?
Esto es imposible de responder. Antes de que existiera instagram, ya había sitios instagrameables a los que había ido. Marruecos es un país al que he ido muchas veces, Italia también. Islandia para los amantes de la naturaleza muy recóndita y radical me parece muy llamativo y muy cercano. Es otro mundo. Grecia es muy instagrameable. Depende de lo que consideremos instagrameable. Yo soy muy amante de los road trips, para poder perdernos por naturaleza, carreteras y poca gente. Mi idea de viaje prefiero sería ese. Siempre hay excepciones porque también me gustan Santorini y Nueva York. Ahora hay muchos sitios que se adaptan para ser instagrameables.
¿Es Instagram la red social de los viajes?
Sí, efectivamente a día de hoy lo es y lleva años siéndolo porque ha sido la red en la que, cuando nace, prima la fotografía. Se valora la calidad de las fotos. Es verdad que el mundo de los viajes se ha centrado mucho en instagram. Es donde el viajero se mueve para buscar información y encontrar nuevos sitios y localizaciones para sus próximos viajes es instagram. La gente se inspira y le entran ganas de viajar viendo los viajes de otras personas en instagram. Esto es indiscutible. Lleva años siendo así. Hay destinos y empresas que lo saben muy bien y llevan años aprovechando esto y haciendo campañas con influencer en instagram porque es la realidad. Es la red social que inspira a la gente a moverse y a viajar, porque al final te están taladrando diariamente con millones de imágenes de sitios increíbles y es imposible que no te dejes inspirar por ellos.
Si pudieras viajar en el tiempo, si te fueras al pasado, ¿qué lugar y tiempo elegirías? Y si fuera el futuro, ¿cuál sería el lugar?
Si pudiera viajar en el tiempo, querría ir a la época romana, una época que me fascina. Yo soy de Tarragona ciudad y tiene muchos vestigios romanos y tuvo un papel súper importante en la época del Imperio Romano. Me parece una civilización y una época muy interesante por lo avanzada que era en muchísimos aspectos. Por su arquitectura, por la construcción, por su manera de ver las cosas … me encantaría colarme en plena época romana y pasear por Tarragona y ver como era mi ciudad en la época del Imperio. También hay otras épocas en las que me gustaría poner el pie y salir corriendo como por ejemplo la Edad Media porque debió ser muy duro el día a día y la realidad.
Nunca me he planteado viajar al futuro. Si me diesen la oportunidad sabiendo que puedo volver si me iría. Me gustaría ver cómo está el futuro en España. Para saber cómo está nuestro país, los sitios en los que he vivido. No me presenta mucha curiosidad el futuro de otros lugares. Me gustaría ver cómo nos las hemos apañado con los años, porque ahora mismo pensar en el futuro es algo poco esperanzador. Sobre todo a nivel de cuidado del planeta, ecología y cambio climático.
¿A qué lugar volverías una y otra vez?
Soy una persona que vuelve a muchos sitios. Me gusta volver a los sitios que me han gustado. Me gusta la sensación de volver a un sitio que ya has estado, recuerdas esa primera vez, lo ves con otros ojos y repites cosas que te han gustado. No tengo ningún ansía de no volver a los sitios que me han gustado por viajar a otros nuevos. Ya no estoy en esa carrera que tenía antes de aprovechar los pocos días que tenía para viajar. Ahora disfruto más del camino y no me importa si estoy en un país menos días de los que querría porque pienso que ya volveré. Hay países que podrías ir 10 veces y ver cosas diferentes. Hay sitios que merecen que vuelvas una y mil veces. Me voy de muchos sitios pensando que quiero volver y voy a volver, me tranquiliza pensarlo.
¿Tu destino pendiente?
Tengo muchísimos. He visitado 60 países y hay 196. Como pendiente tengo Oceanía, un continente que no he visitado. Australia y Nueva Zelanda lo tengo siempre entre ceja y ceja. También tenía Chile y Argentina. Cumplí Chile el año pasado. Me queda Argentina.
¿Tu lugar favorito de España?
Es una pregunta muy complicada. No lo tengo. Yo soy de Tarragona, soy catalana, y hay muchos sitios en Cataluña que me encantan. En España tenemos una riqueza de lugares increíble. Es un tópico pero es la realidad. Es un mix de muchos. En Cataluña hay sitios que me parecen espectaculares. Las Baleares me parecen una perla en el mediterráneo. Son muy fan de las Baleares. Canarias que es muy diferente tiene un halo místico, volcánico … son especiales. La Rioja me gusta mucho, me parece preciosa. En España hay tantos sitios … te vas por el Norte y es precioso, te vas a Andalucía y es súper pintoresco. El año pasado hice una campaña por Comunidad Valenciana y vi una costa de Alicante que no conocía de calas preciosas. Te mueves y dices si es que en todas las Comunidades Autónomas hay perlas. No se cual es mi lugar favorito en España. No te puedo decir uno solo. Imposible.
Y un lugar de España que no aparece en las guías y que te parezca imprescindible.
L’Ametlla de Mar, un pueblo en la provincia de Tarragona, en la costa. Está entre Tarragona ciudad y el Delta del Ebro. ES una zona costera, rural. Tiene una sierra de montañas detrás, el mar delante, una zona de calas -la única de Tarragona-. Es un sitio muy auténtico en el que parece que no ha pasado el tiempo. La globalización no va con ellos. Sigue teniendo ese halo de pueblo pesquero, con sus calas, su vida tranquila, con sus casitas delante del mar, con las montañas de fondo, el Delta a 30 minutos … Es el pueblo donde nació mi abuela y lo he valorado más de mayor que de pequeña. Es un sitio que me encanta y poca gente conoce y es precioso. Muchísimos franceses, suizos y belgas vienen desde hace años aquí a pasar sus vacaciones de verano. Un verano perfecto. Un verano mediterráneo. Sin grandes turismos y sin colas en los restaurantes.
Tu rincón favorito del mundo.
Hay muchos sitios que me han gustado. Hay sitios que me han impactado más, quizá por el momento en el que he hecho el viaje. Mi primera vez en Marruecos, por lo que significó. Mi primera vez en un país musulmán, con una serie de prejuicios y miedos, y el viaje te responde con una bofetada de realidad increíble. Es maravilloso. Mi primer atardecer en el Sáhara. Mi viaje de novios a Namibia. No tengo un lugar favorito del mundo. California me encanta y me encantaría vivir allí una temporadita. Tengo tantos lugares favoritos que se me hace difícil decirte uno y descartar los demás.
Si tuvieses la oportunidad de volver a nacer y elegir el lugar (ciudad – país) de donde te gustaría ser, de todos los lugares en que has estado, ¿Cuál sería y por qué?
No me lo planteo. Estoy súper agradecida de donde he nacido, de la familia y de todo. Pero me gustaría que fuera en un país y una cultura como ha sido. Hemos nacido con una serie de cosas que nos han dado y otras personas tienen que ganarse en otros países. No me gustaría encontrarme en la situación de haber nacido en alguna zona súper cerrada de América Latina o Asia. Lo que si me parece interesante es Estados Unidos, en algunas cosas muy positivas y en otras muy negativas. Si pudiese escoger, escogería un país en el que no tengo que luchar por mis derechos y ya he nacido en Europa, ya se como es. Me decantaría por nacer en Estados Unidos y vivir la cultura americana desde un inicio. Nacer en California, un Estado que me encanta. Me gustar el vivir al aire libre, el deporte, la naturaleza. La cultura californiana me parece interesante.
¿Qué es lo que más echas de menos cuando estás fuera?
Lo que echo más de menos es la rutina, quizá por la alimentación. El poder comer lo que a mi me apetezca. Me gusta comer sano y tener mis rutinas de comida. Es lo que más pierdes cuando estás de viaje. La tranquilidad de estar en casa y llevar tus rutinas.
¿Es España el país turístico más competitivo del mundo?
España, Italia y Francia son los tres países más visitados del mundo. Hay competitividad entre ellos y hay competitividad interna en España porque hay muchísimas zonas turísticas. España tiene muchísima variedad: tiene montaña, tiene mar, tiene islas, tiene interior, tiene hoteles de lujo, tiene hoteles rurales, tiene de todo … y compite con Italia y Francia que son países muy similares en este sentido porque tienen muchísima variedad. Italia tiene más popularidad que España, tiene un punto más atractivo y de glamour para los extranjeros. Estamos en el top de los destinos mundiales, en el top del sector del turismo, en la calidad de la hostelería … y eso implica competitividad. Somos un súper destino. Un multi destino con muchísimas opciones. Es un súper destinazo. Y a veces no se promociona ni se sobre vende como se hace en Italia y Francia que son mucho mejores que nosotros en eso.